Es sabido que las relaciones sexuales pueden ser peligrosas… y no solo por la posibilidad de contraer algún tipo de enfermedad o salir emocionalmente lastimado, sino por el hecho de que realmente puedes sufrir graves lesiones.
Una lesión dolorosa y poco común, pero posible es la fractura de pene.
Fractura de pene: ¿qué es exactamente?
El pene no tiene hueso, por lo tanto hablar de fractura no es lo más apropiado. Se conoce como fractura de pene a la ruptura de la túnica albugínea, de los cuerposcavernosos del pene o de ambos tejidos.
El tratamiento a seguir implica una cirugía que, si bien es sencilla, se debe hacer lo antes posible ya que de lo contrario puede haber secuelas tales como la curvatura de pene, disfunción eréctil y dolor crónico. Esta lesión se considera una emergencia médica.
La fractura de pene sucede mientras el pene está erecto y a causa de un movimiento lateral demasiado abrupto o un golpe o trauma. El síntoma inmediato es un leve sonido «crack», seguido de un inmenso dolor, seguido de una gran inflamación.
La posición sexual más peligrosa para el hombre
Teóricamente una fractura de pene puede suceder en cualquier momento del coito y en cualquier posición. Lo cierto es, sin embargo, que existen algunas posiciones más y menos peligrosas para el hombre.
Según una investigación publicada en la revista científica Advances in Urology la posición sexual más peligrosa es «la mujer arriba».
A pesar de que sea una de las posiciones preferidas por los hombres, estadísticamente «Mujer arriba» es la posición más asociada a fracturas de pene.
La posición de «El perrito» reportó un 29 % menos de traumatismos de este tipo y la clásica «El misionero» a penas se vio en el 2 % de los casos.
¿Por qué será que «Mujer arriba» puede causar más fácilmente una fractura peneana?
Dado que esta posición le da a la mujer el control sobre la velocidad y la profundidad de la penetración, el hombre no es capaz de deterner o corregir la actividad en caso de que algo «vaya mal». Esto, según sugieren los científicos, impide que el hombre mitigue los efectos de una entrada demasiado abrupta o desviada.
En otras palabras, el peso y control de la mujer encima hace que el hombre no pueda corregir una posición incómoda o dolorosa que puede conducir a una fractura de pene en un caso extremo.
Tres cosas que necesitas saber
1.- Es una lesión muy poco frecuente: El primer caso registrado oficialmente fue en 1924 y desde entonces solo se han registrado unos 1600 casos en todo el mundo. Eso da un promedio aproximado de 17 fracturas de pene al año. Bastante alentador, ¿no?
2.- Aún así, no deberías tentar a la suerte: Además de la posibilidad de sufrir esta lesión durante el coito, las estadísticas indican que también te puede suceder por causas mucho menos dignas como caerte de una silla o rodar por las escaleras… con el pene erecto.
3.- No es culpa de la mujer: tú mismo debes cuidar tu propio órgano sexual… Además, aunque no lo creas, puedes hacértelo tú mismo masturbándote.
Agencias
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