Iba a ser la foto de sus vacaciones. Estaba a centímetros del delfín, que jugaba y nadaba ante la cámara.
Sin embargo, sin que pudiera evitarlo, el animal le sacó el iPad y se lo tiró al agua. Aunque la mujer tuvo la rapidez suficiente para recuperarlo, su disgusto era notorio.
“Como pueden ver, los delfines pueden tomar sus objetos”, dijo con humor el locutor que hablaba por los altoparlantes.
Infobae
0 comentarios:
Publicar un comentario