La mayoría de las personas no tienen mucha habilidad para estacionar, sobre todo si se trata de hacerlo marcha atrás. Cuando una persona está insegura o está bajo estrés, estacionar resulta una historia muy desagradable. Pero lo más enfurecedor que puede pasarle a alguien es que una persona esté en medio de la maniobra de aparcamiento, cuidando que todo esté bajo control, sobre todo si está haciéndolo marcha atrás, y de repente, de la nada alguien más ocupa el lugar que habíamos avistado y nos estábamos preparando para ocupar con nuestro vehículo. Pero lo que hizo esta mujer en este caso, me tomó por sorpresa por completo.
0 comentarios:
Publicar un comentario